miércoles, 24 de agosto de 2011

un plan marshall de los ricos: piden pagar más impuestos


Lo mismo que hace diez días había pedido Warren Buffet --quizá el tercer hombre más rico del mundo-- desde las páginas del ‘New York Times’: ‘pagar más impuestos’; también algunos grandes empresarios de Francia, en un manifiesto publicado en ‘L’Observateur’, lo han pedido.

            La iniciativa es muy reconfortante y nos es grato hacernos eco de ella. Pero no nos engañemos: no se trata sólo de filantropía, sino de una iniciativa inteligente y acertada… en la línea que ya marcó, al finalizar la 2ª Guerra Mundial, el ‘Plan Marshall’ que puso en marcha EE.UU. para impulsar la economía de Europa.

            ¿Por qué? Porque las empresas, todas las empresas, cualesquiera empresas, sólo pueden sobrevivir si cuentan con clientes: gente que pueda comprarles lo que ellas ofertan. Pero si nadie hay con suficiente poder adquisitivo para esto, entonces van a la quiebra.

            Lo cual también es aplicable a las propias naciones: si, para reducir su deuda sobrevenida porque gastan más de lo ingresan, se les ocurre el disparate de subir, en general, los impuestos, dejarán a más personas sin dinero para sus compras habituales, de modo que cerrarán comercios y fábricas, y se generará desempleo que, aún más, cohibirá el consumo, arruinará empresas, provocará más paro,… Y, de esta forma, ¡menos aún! habrá suficiente dinamismo económico para poder recaudar impuestos,… y quebrarán,... tal como estamos viendo estos días que sucede con países que se someten, mendigos, a los dictados del BCE en manos de ‘supuestos’ economistas que parece que no tienen, o no quieren tener, ni idea de lo que es la vida real…

            Y, en estas condiciones, al menos topamos con empresarios inteligentes, como ahora esos franceses, que deciden protagonizar su privado y diminuto, aunque más bien sólo publicitario, ‘plan marshall’ de andar por casa, pidiendo pagar más impuestos para maquillar un poco su aspecto… pero con un Sarkozy que les va a proponer sólo un uno o un dos por ciento más de tributación con la que recaudará unos 300 millones anuales suplementarios… ¡Menuda miseria! Con eso el francés de tacón alto no va tener ni para los gastos de representación de su estilosa esposa de zapatos bajos.

            Pero el gesto de los potentados galos, como el que días antes ha tenido Warren Buffet, va en buena dirección y hay que alabarlo.

            Sobre todo, porque, aunque haya sido por egoísmo ‘subjetivo’, camina hacia esa solidaridad ‘objetiva’ que nos viene imperada irremisiblemente a todos desde que todos somos meros ‘infinitésimos de infinitésimo’ del conjunto del Universo del que formamos parte. Solidaridad que, si no la profesamos, acabaremos mostrando --y mostrándonos ante nosotros mismos--  el descomunal fracaso existencial en que incurriremos al haber intentado vanamente erigirnos en diosecillos independizados de los demás,… cuando no en repugnantes tiranos de ellos.

            Y recordemos que encararnos a semejante fracaso existencial desde la rabieta renuente, irreductible, de nuestra soberbia frustrada, es el mayor tormento imaginable que, además, nos imponemos nosotros solitos a nosotros mismos: el ‘infierno auténtico (y no ése que, para hacer éste quizá más vulgarmente comprensible, se nos blande como amenaza divina… Pues no: Dios --es decir: el ser que ‘existe por sí mismo’; y no ese ‘señor tronante y con barba’ que nos abrume con ‘mandamientos’-- es simplemente Creador (puesto que sólo Él existe ‘por sí mismo’ y todo lo demás existirá mediante existencia ‘participada’); y con eso ya basta y sobra para que si alguien quiere ‘rebelarse’ contra su obvia realidad de ‘creatura’ y decidiese ‘romper’ con su intrínseca exigencia ontológica de solidaridad con las demás creaturas, ¡en eso! mostrará y se mostrará a sí mismo su fracaso existencial y ¡con eso! --como decimos-- se habrá metido él solito en el ‘infierno’: en su ‘infierno’ de toparse con su contingencia cuando se emperra en ser ‘independiente’, incontingente…)

Prof. Dr. Fernando Enebral Casares  

(publicado también en http://peso-press.blogspot.com/)


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